Los goles de Bernat Turrientes y Manu Sánchez fueron suficiente para llevarse el triunfo de Sevilla
MADRID, 18 Nov. (EUROPA PRESS).- La selección española Sub-21 puso el punto y final al año 2022 con una victoria por 2-0 ante Japón, en un encuentro amistoso este viernes en el Estadio de La Cartuja de Sevilla, donde ‘La Rojita’ demostró su solidez defensiva y sumó su sexta victoria consecutiva, ante un rival fuerte y competitivo.
Antes de que los combinados absolutos de ambos países se enfrenten el próximo 1 de diciembre en el Mundial de Catar, el partido entre sus Sub-21 dejó un duelo disputado, en el que los de Luis de la Fuente, de menos a más durante el encuentro, exhibieron su fondo de armario y solventaron con nota el choque ante un rival de prestigio.
Y es que tanto España como Japón apostaron por un fútbol muy vertical desde el pitido inicial que, aunque pareció diluirse con el paso de los minutos, los españoles no tardaron en recuperar para arrinconar a los visitantes en su campo, desbordando una y otra vez por la banda del atacante del Tottenham Bryan Gil, muy participativo en el juego.
De sus botas nació la juzgada más peligrosa de ‘La Rojita’ en la primera mitad y tras una buena triangulación del de Barbate, Manu Sánchez centró un balón al punto de penalti que Sergio Gómez no aprovechó y la pelota salió muy centrada a las manos de Sasaki. La réplica de los japoneses no tardó en llegar, pero una mano prodigiosa de Arnau Tenas, evitó el tanto japonés.
Movió el banquillo Luis de la Fuente en el descanso y fue precisamente el recién incorporado Beñat Turrientes el que rompió la igualada. El jugador de la Real Sociedad aprovechó un rebote en el área pequeña, después de un disparo de Sergio Gómez, para dar ventaja a los suyos y desatascar el partido. Como en el primer tiempo, el conjunto nipón quiso devolver pronto el golpe recibido, pero otra vez Tenas taponó con su cuerpo el disparo de Mito.
Rodrigo Riquelme, otro de los cambios, tuvo poco después el 2-0, pero su disparo desde la frontal acabó repelido por el poste. A partir de ahí, buenos minutos de los locales, que ahora sí, se hicieron con el dominio absoluto de la pelota, amenazando una y otra vez la portería rival. Fue Manu Sánchez el que finalmente se encontró el premio del segundo gol.
El lateral izquierdo de Osasuna aprovechó un balón rechazado por el portero nipón para marcar a contrapié de cabeza, previo a una muy buena diagonal de Riquelme, que no pudo finalizar. Los nipones intentaron tímidamente acercarse en el marcador, pero la solidez defensiva local fue suficiente para guardar el resultado e irse de Sevilla con la portería a cero. En 2023 toca Europeo.