La Cámara de Diputados de Bolivia (Cámara Baja) ha dado ‘luz verde’ este sábado a la Ley del censo tras una maratoniana sesión que se ha prolongado por siete horas y ha culminado cerca de las 2.00 horas (hora local).
Del total de 119 diputados que estaban presentes en la sala, 91 han votado a favor, 25 en contra, otros tres en blanco. Así, la propuesta ha recabado el apoyo de más de dos tercios de la cámara y será enviada ahora al Senado.
La ley del censo ha venido acompañada de polémica y enfrentamientos en Santa Cruz, la principal región económica del país y donde la oposición de ha hecho fuerte en las últimas semanas con una serie de protestas en las que se exigía el adelanto del censo.
El presidente boliviano, Luis Arce, había fijado para marzo de 2024 la realización del censo de población, mientras que los opositores han salido a las calles para exigir que este proceso se llevara a cabo un año antes, en 2023, según recoge ‘El Deber’.
La legislación boliviana estipula que el censo poblacional debe realizarse cada diez años, si bien el último se produjo en 2022. El recuento de habitantes podría derivar en la ampliación de recursos económicos, así como un reajuste de la representación en el Parlamento.
La oposición ha acusado a Arce de tratar de retrasar la asignación de ayudas, mientras que el mandatario ha hecho sucesivos llamamientos a la calma y ha pedido el fin de un paro en Santa Cruz que se ha prolongado por más de un mes.
Con la aprobación de la Ley del censo se da el primer paso para llevar a cabo este mecanismo, aunque por el momento todo apunta a que se seguirá adelante con el plan del Gobierno y el recuento de población se llevará a cabo en marzo de 2024, a pesar de las críticas. (EUROPA PRESS)