LA PAZ, 4 Jun (NÓMADA NEWS). – Una multitudinaria marcha de choferes que se in inició en El Alto y llegó a La Paz, a la que se sumaron otros sectores, colapsó la ciudad y culminó con una decisión de no pagar peajes mientras no se resuelva la escasez de combustibles y hasta la posibilidad de decretar una huelga de hambre.
Como estaba anunciado, tras la movilización, que se reforzó con otro grupo que partió de la zona sur de La Paz, se realizó un mitin donde se tomó la decisión de continuar movilizados mientras el Gobierno no resuelva el problema de los combustibles.
Tras encendidos discursos de sus dirigentes, que aseguraron que trabajan solo la mitad de lo que habitualmente lo hacen por falta de gasolina y diésel, exigieron a las autoridades del Ejecutivo, particularmente al presidente Luis Arce, que prometió solucionar ese problema hasta el anterior lunes, pero aseguraron que la situación se complica muchos más.
También cuestionaron a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) que también anunciaron que las filas se acabarían y que descargarán el combustible necesario para terminar con la falta de carburantes, pero tampoco cumplieron.
En sus discursos insistieron que la movilización no tiene ninguna petición política y remarcaron que la marcha es pacífica, aunque las televisoras mostraron imágenes de excesos y violencia contra vehículos particulares y sus propios afiliados.
Red Central-rsl