MADRID, 14 Jul. (EUROPA PRESS).- El tenista español Carlos Alcaraz admitió este viernes que «suena increíble» ser finalista del torneo de Wimbledon y que «tácticamente» había hecho «un partido perfecto» para batir al ruso Daniil Medvedev (por un triple 6-3) en las semifinales del tercer ‘Grand Slam’ de la temporada, que se disputa sobre hierba en Londres (Reino Unido).
«La verdad es que suena increíble, no vamos a mentir», declaró Alcaraz a Movistar Plus sobre su condición de finalista. «Hoy ha sido un partido espectacular por mi parte. Aunque empecé el torneo bastante bien, he ido encontrándome cada vez mejor, mostrando mi mejor nivel y vamos a la final a ganarla, por supuesto», dijo el murciano.
«He mostrado un nivel muy, muy bueno desde el principio. Voy a decir que tácticamente ha sido increíble, como ya jugué la final en Indian Wells. Tácticamente yo creo que he hecho un partido perfecto y no le he dado opciones a nada, ni le he dejado margen de nada. Siempre he dicho que, si muestro este nivel de tenis, nivel táctico y nivel mental, muy pocos jugadores pueden mostrar un nivel que pueda pasarme por encima», argumentó el tenista de El Palmar tras doblegar a Medvedev.
Preguntado sobre si la final ante el serbio Novak Djokovic será el reto más grande de su carrera, Alcaraz fue tajante: «Sin ninguna duda». «La verdad es que aquí ganarle a Djokovic en la Central, que lleva 10 años sin perder, que lleva cuatro títulos seguidos si no recuerdo mal, un ‘winning streak’ de 44… Para mí sí va a ser el reto más complicado de mi carrera, pero a la vez el más bonito», apuntó.
«Él es un jugador muy competitivo, muy ambicioso, nunca se conforma con nada, siempre quiere más y más. Si no he visto mal, él ha dicho que los 36 son los nuevos 26», bromeó al respecto. «Él mismo lo dice, que tiene mucha hambre, quiere ser el mejor de la historia y al final lo demuestra en cada torneo, en cada partido», indicó.
«Vamos a intentar que sea así, tener más hambre que él, aunque va a ser difícil. Pero nosotros sabemos de lo que somos capaces, de lo que queremos, de que queremos seguir soñando y ver qué pasa el domingo en la final», añadió el murciano justo antes de analizar sus próximas citas en las instalaciones del All England Lawn Tennis & Croquet Club.
«Ahora entre la bicicleta, soltar [músculos], los baños fríos… pues tampoco hemos hablado mucho. Pero bueno, eso lo tengo que hablar con mi equipo. El no coger la raqueta tampoco me ha influido a mal, así que vamos a ver, de una manera o de otra estaremos bien», aseveró.
Además, calibró su meteórica progresión y cómo eso puede afectar al carácter. «Al final, soy el mismo chico de siempre. Tengo la suerte de viajar con mucha gente de mi equipo, de mi familia. Al final, estar rodeado de la gente a la que quieres, de la gente a la que te ha visto crecer, te ayuda a mantener ese chico de siempre», subrayó.
En este sentido, precisó que su círculo le ayuda a no creerse «mejor que nadie», sino «simplemente» a «seguir viviendo el sueño de un chaval que empezó a jugar a tenis y que lo ha cumplido pronto». «Intentamos siempre disfrutarlo al máximo y, sobre todo, yo soy un chico muy, muy alegre, que gasta muchas bromas y al final el estar de esa manera con tu equipo te ayuda mucho», concluyó el de El Palmar.