LA PAZ, 5 May (NÓMADA NEWS).- Los maestros del país decidieron este viernes romper el tapiado en el que se encontraban tres de sus principales dirigentes hace cinco días, sin acceso al agua ni a alimentos, porque fueron advertidos de que su salud estaba en peligro y lo trasladaron a un centro médico.
El pasado lunes los dirigentes nacionales Patricio Molina, Wilfredo Ajllahuanca y Ludbin Salazar, decidieron ingresar en esa extrema medida en demanda de achicar el déficit histórico de horas trabajadas, más ítems y en oposición a la nueva malla curricular implementada por el Ministerio de Educación.
La decisión de impedir que sus dirigentes sigan en esa extrema medida, además de levantar la huelga de hambre que cumplían otros dirigentes en todo el país, fue asumida en un ampliado nacional que se realizó en La Paz y que analizó también la nueva propuesta enviada por el ministro de Educación, Edgar Pary.
Según la médica, Paola Pérez, los maestros que se encontraban tapiados “tenían las horas contadas” si se mantenían en esa medida porque, a su juicio, tenían síntomas delicados y el riesgo de muerte era inminente.
Los dirigentes anunciaron que en las próximas horas evaluarán la nueva propuesta del Ministerio de Educación y decidirán las medidas a asumir en una movilización que lleva ya nueve semanas de movilizaciones.
Red Central-rsl