Chile y Bolivia se preparan para escuchar este jueves el fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, en Países Bajos, sobre el estatus de las aguas del Silala, un litigio abierto desde hace años entre La Paz y Santiago, tomando en cuenta que Bolivia considera que es un manantial propio y Chile un río de curso internacional.
El ministro de Exteriores boliviano, Rogelio Mayta, liderará la comitiva que acudirá a La Haya, mientras que, del lado chileno, serán la subsecretaria de Exteriores del Gobierno chileno, Ximena Fuentes, así como la funcionaria Carolina Valdivia, las que viajarán a Países Bajos.
«Va ir una delegación de nuestro Ministerio de Relaciones Exteriores para hacer seguimiento y conocer lo que va a determinar la Corte», dijo este lunes la ministra de la Presidencia boliviana, María Nela Prada, confirmando que será Mayta quien la liderará, según ha recogido el diario ‘El Deber’.
Prada resaltó que la parte boliviana está «expectante» por la resolución del litigio. «Una vez se conozca (el fallo) vamos a emitir nuestra posición», indicó, sin dar más detalles sobre esta posible postura de Sucre.
Por su parte, la ministra de Exteriores chilena, Antonia Urrejola, confirmó la asistencia de Fuentes y Valdivia, y también ha subrayado que ella presenciará el fallo junto con el presidente Gabriel Boric desde el Palacio de La Moneda.
Asimismo, Urrejola agredeció el trabajo a todos los implicados en el caso, tanto científicos como funcionarios, después de encabezar una reunión de trabajo de cara a los futuros escenarios que se puedan dar tras la decisión de la Corte.
«Esperamos que, a partir del fallo, se abra una oportunidad para seguir trabajando con el país vecino, con Bolivia, en una agenda positiva», zanjó la titular de Exteriores chilena, según un comunicado remitido por el Ministerio.
Según informó el pasado 11 de noviembre el organismo, la resolución se conocerá a las 15.00 horas (hora local) de la mano de la presidenta de la Corte, Joan E. Donoghue, durante una reunión pública en el Palacio de la Paz de La Haya.
La gestión de las aguas dulces del Silala ha sido motivo de enfrentamientos judiciales entre ambos países ante el organismo, porque Santiago considera que es un río internacional y La Paz sostiene que es un manantial exclusivo de su territorio nacional.
El conflicto territorial se remonta a 1879, cuando Bolivia perdió su salida al Pacífico en la guerra que mantuvo con Chile, que culminó con el Tratado de Paz y Amistad de 1904, sobre el derecho de libre tránsito de mercancías bolivianas hacia y desde puertos en ese océano. (EUROPA PRESS)